jueves, 21 de julio de 2011

UN COCODRILO QUE NO DA MIEDO


La primera vez que lo vi fue en el blog cocina con Ana, después he visto otros panes con formas de animales o caretas de carnaval en revistas especializadas para profesionales del pan.
Son panes divertidos que llaman la atención de grandes y sobre todo la de los pequeños, ya que si regalas un cocodrilo cuando te invitan a la  fiesta de cumpleaños de un peque, la diversión está asegurada pues todos quieren comer un trocito del “ cocolilo” como ocurrió el año pasado en un cumpleaños al que me invitaron; aunque en esa ocasión el cocodrilo lo hice con masa de brioche para comerlo con el chocolate.
. Tengo la panificadora Bifinet que compre en Ldl. hace dos o tres años y que utilizo los días en que mis brazos no están útiles para realizar un amasado en condiciones.
La compre porque soy incapaz de renunciar al placer de comer un pan, un brioche, un roscón o una mona de pascua recién hechos.
Primero por la calidad y autenticidad que tiene el producto al hacerlo en casa y desde luego por el placer que me produce el olor que sale de mi horno y que se dispersa por la casa y hasta  por la escalera.
Así que en esta ocasión utilice la panificadora  en el programa 7 que aunque es para hacer pasta yo lo utilizo para hacer ciertas masas.


INGREDIENTES:

400 gr. de harina
200 ml. de agua
18 gr. de levadura
40 ml. de aceite
1 cucharadita de las de café de sal

ELABORACIÓN:

Poner en la cubeta de la panificadora en primer lugar el agua, el aceite y la sal, encima pongo   la harina y  programo la maquina en el  numero 7.
Este programa dura 15 minutos, cuando termina le añado la levadura desmenuzada y le doy otra vez al programa 7 durante 10 minutos más.
Tengo la costumbre de dejar que algunas piezas hagan el primer levado dentro de la cubeta, aprovechando el calor residual que se produce solo por el funcionamiento de la maquina.
Cuando la masa tiene el doble de volumen la pongo encima de la mesa y  la trabajo para desgasificarla, hoy la he trabajado con el rodillo para extenderla y después la he enrollado sobre sí misma para dar la forma del cuerpo, apartando cuatro bolitas para hacer las patitas del cocodrilo.
Una vez que está formado cortamos la boca con tijera bien afilada y colocamos papel de horno dentro para que mientras vuelve a levar la masa no se cierre ni se deforme, lo cubrimos con un paño blanco de algodón y lo dejamos apartado de corrientes de aire hasta que vuelva a doblar su volumen.
Precalentamos  el horno a 180º unos minutos antes  y cortamos con tijera la forma de las escamas y tres cortes en las patitas para darles la  forma definitiva, metemos al horno y dejamos que pasen 20 minutos o hasta que coja un color bonito y que la suela del pan nos suene a hueco, entonces estará bien cocido por dentro.
Sacar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla.
Si tenéis niños pequeños y les ponéis en la comida o merienda un pan así  seguro que los haréis felices y la comida será más divertida, os lo aseguro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario